Europa pide ayuda a los «Pitufos» para simbolizar la lucha contra el cambio climático
La Unión Europea (UE) y los personajes de los Pitufos comparten que ambos se identifican con el color azul y que ambos «se preocupan por la salud de nuestro planeta azul», según la Comisión Europea (CE), que ha incorporado a esos pequeños dibujos a la lucha contra la contaminación de los residuos plásticos
«La polución marina es uno de los problemas medioambientales más acuciantes, en Europa pero también en el resto del mundo. Con los Pitufos, hemos encontrado a unos socios que pueden ayudarnos a llegar a todo el mundo, compartiendo nuestros valores y prioridades», declaró este miércoles el director general de Asuntos Marítimos de la CE, Joao Aguiar Machado.
Para mitigar la contaminación que provoca el plástico en el litoral, responsable del 70 % de la basura marina de las costas europeas, el Ejecutivo comunitario se ha asociado con la compañía que gestiona los derechos de emblema infantil creado por el dibujante belga Peyo, la firma IMPS.
Como parte de esta iniciativa, el Ejecutivo comunitario animará a sus embajadas en todo el mundo a organizar actividades con organizaciones locales y colegios para promover la descontaminación de los océanos.
El año pasado, sólo las delegaciones de Mozambique y Senegal retiraron 10 toneladas de basura de la costa en sólo una jornada y la Comisión Europea cree que con ayuda de los Pitufos el impacto de estas campañas ganará en alcance.
«Queremos incrementar la concienciación global sobre el estado de nuestros océanos y nuestra responsabilidad individual de cuidarlo. La gente encontrará muy familiar las cosas de la playa: botellas de plástico, colillas de cigarrillos, envoltorios de caramelos… la campaña ‘Límpialo’ puede ayudarnos en nuestro propio comportamiento y hábitos diarios», añadió Machado.
La Comisión Europea es consciente de que «por supuesto, la buena voluntad tiene un alcance limitado» y por ello los Estados miembros de la Unión Europea tienen la obligación de dotarse de planes de gestión de residuos, lo que a menudo se echa en falta en los países en desarrollo.
«La Unión Europea también está ayudando en eso. El año pasado, la UE destinó 9 millones de euros a reducir la basura marina en el sudeste asiático y 19 millones para apoyar los programas de gestión de deshechos en la región del Pacífico», añadió el Ejecutivo comunitario.
En paralelo, la UE ha aprobado nuevas normas para frenar el empleo de plásticos de un solo uso, especialmente los objetos que con más frecuencia terminan en las playas, y a partir de 2021 como máximo estarán prohibidos en el territorio comunitario los plásticos no reutilizables de bastoncillos para los oídos, cubiertos o pajitas de plástico.
Ese paquete legislativo también busca poner coto a los materiales empleados para la pesca, a los que la CE atribuye el 27 % de la contaminación plástica del litoral.